8 de noviembre: felicitación especial

Hoy no os voy a hablar de educación, ni de docentes, ni de alumnos... aunque sí de uno de mis maestros, mi padre.

 Es su cumpleaños y aquí le dejo mi felicitación.

Por ser hoy tu cumpleaños entré a un lugar a buscarte un regalo, quizás seria una camisa, un jersey, un perfume...no lo sabia, solo sabia que quería algo especial, de pronto vino a mi mente todo lo que vales para mi y me di cuenta que lo que había en ese lugar era muy poco para ti. Fue entonces cuando pensé que el mejor regalo que podía darte era decirte cuanto te quiero.

Por eso hoy mi regalo no lo busque en una tienda, sino en mi corazón y mira todo lo que encontré en el, para ti. Primeramente vi. Que hay una admiración muy grande por ti papa, porque has sido un gran padre, y un buen amigo también. Igual vi, un enorme agradecimiento, no solo por darme la vida, si no porque me has dado los mejores recuerdos que tengo, por ejemplo, me diste una niñez feliz, muy feliz, en mi juventud me diste la oportunidad de decidir mi futuro, lo he hecho de la mejor manera, y supongo que en algún momento pueda fallar, pero son estas experiencias las que nos hacen crecer. Siempre has estado cerca para ayudarme cuando he necesitado.

Me has dado mucho papá y yo te he devuelto tan poco, por eso hoy quiero devolverte aunque sea un poquito de esos momentos que tú me has regalado.

Además, me toco el mejor padre del mundo.



 A pesar de los kilométros que nos separan, hoy te deseo un muy feliz cumpleaños.

Bueno, no sólo te lo deseo yo, sino también Nano, pero él todavía no sabe decirlo, como mucho te dará unas palmas o un beso como babas a modo de regalo.



3 comentarios:

Mon dijo...

No dejes nunca de decirle que le quieres.

Bravo por poner en palabras sentimientos tan bellos.

ROCIO. dijo...

Felicidades a tí y a tu papá!
Me emocionado con tu entrada, te entiendo perfectamente porque yo también tengo la suerte de tener un padre maravilloso.
Es precioso decir te quiero y aún más tener a quién decirsélo.
Besitos. Cuidate.

Anónimo dijo...

Sin duda es el mejor regalo de cumpleaños que como padre puedo recibir, porque siempre queda la duda de si lo habré hecho bien, mal o regular.

Me habré equivocado en unas cosas y en otras habré acertado; es lo que tiene ser padre o madre, que los hijos venís sin libro de instrucciones bajo el brazo.

Sí he tenido claro siempre que ante todo eres y serás persona, y que debía respetar tus decisiones; mi obligación ha sido, y será mientras viva, intentar aconsejarte lo que yo puedo entender y ver desde mi experiencia, pero tu decidirás siempre en última instancia.

Me gustaría decirte muchas cosas, y lo haré de viva voz y mirándonos a los ojos, que es como se debe hacer, pero quiero que sepas algo: que siempre he estado y estaré muy orgulloso de ti como persona e hija, y que si hay dos momentos, entre muchos otros, que guardo con especial cariño en mi alma son el día que naciste y esos ojos tan preciosos que me enseñaste ya desde la cuna y que decían que serías alguien muy especial en mi vida; y el día de tu graduación recogiendo el título, fruto de tus esfuerzos y tesón por ser lo que más anhelabas, maestra.

El primero me hizo feliz por sentirme padre, en minúsculas, porque empezaba un largo camino de aprendizaje; el segundo por sentirme padre con mayúsculas, porque sin pronunciar una palabra sentí el placer y la confirmación de que lo había hecho bien contigo; ese día, lo creas o no, me gradué contigo.

Me has dado mucho y muy grande; hora va siendo ya de que también recojas otros frutos y los disfrutes, porque te mereces todo lo mejor que la vida pueda ofrecerte.

Un beso muy grande. Te quiero un montón.

Publicar un comentario

¡Gracias por dejar tu comentario!

Intentaré responder lo más rápido. Si necesitas que te conteste rápido puedes hacerlo en el correo latizamagica@hotmail.com